Todo sobre las adicciones.
Encontrar el problema representa el inicio de un proceso de superación, sin embargo encontrar el camino adecuado a la solución representa, grandes desafíos por ello hemos desarrollado una linea de contenidos para que cualquiera pueda encontrar la independencia a sus adicciones.
Las adicciones se han integrado a la mayoría de los integrantes de la sociedad y suelen incorporarse como buenos hábitos, pero recordemos que todo en exceso hace daño.
Una vez que se encuentra el problema tenemos que identificar la solución adecuada y existen diversos métodos para combatir la dependencia a algo, sin embargo hacerlo acompañado y guiado por especialistas, hará que la superación sea en periodos adecuados, con consecuencias medidas, pero siempre tomando en cuenta que un par de mentes son mejor que una sola.
Entiende las adicciones
La adicción a algo suele comenzar como un coqueteo y supuesto control sobre el objeto de adicción, pero con bases inestables el camino a la dependencia suele acortarse y volverse un circulo vicioso, donde no hay ganadores pero siempre hay un perdedor.
Debido a lo anterior, aprender a identificar un habito positivo y diferenciar de una adicción es importante pues la frontera entre los mismos es una linea y pasar del otro lado es solo un paso más de los que ya se dieron para llegar a ese punto.
Una vez que ya existe la dependencia a algo puede parecer inocentemente una relación aceptable, pero toma poco tiempo en convertir a alguno de los implicados en el lado más afectado.
Sin duda, neurobiológicamente, las adicciones cambian radicalmente la química cerebral, debido a que se ha comprobado a lo largo de los años que las sustancias adictivas estimulan y refuerzan los centros de placer que son activados cuando cumplimos ciertas necesidades fisiológicas, como tener sexo, comer, dormir, entre otros. Más allá de la biología, es importante entender los aspectos psicológicos que hacen a una persona vulnerable para caer más probablemente en una adicción.
Existe una corriente llamada Psicología del Yo, la cual explica las funciones que tiene la estructura interna de nuestra mente que conocemos como el “yo”, quien se encarga básicamente de lidiar y hacer compromisos entre la realidad externa, nuestros impulsos, nuestra ética y sistema de valores, tanto sociales como personales. Entre todas las funciones que tiene el yo, podemos destacar dos relacionadas con las adicciones: por un lado, el control y la regulación de impulsos; y por otro, el autocuidado propio.
Estas dos funciones estarían alteradas ya que las personas con una adicción no pueden cuidarse a sí mismos (por el daño físico, mental y emocional que genera la sustancia a largo plazo) y generalmente no pueden regular sus emociones, por lo que recurren a la sustancia.
Entenderíamos entonces la adicción como una estrategia para aletargar o dormir a la mente, o por otro lado, llevarla a una situación de éxtasis y poco control, para distraerse y olvidar temporalmente algo doloroso, penoso, avergonzante, etc… La persona pareciera recurrir a una sustancia externa para tolerar una situación interna que le genera mucho dolor, frustración, pena, angustia, y demás emociones negativas.
Por lo tanto, no basta tan solo con controlar el consumo, ya que este se vuelve cada vez más frecuente y en mayores cantidades (debido a la tolerancia a la sustancia que desarrolla el cuerpo), sino entender por qué la persona necesita sedarse o excitarse demasiado para evadir alguna situación emocional que esté enfrentando. Sólo entonces podrá dejarla poco a poco, para recurrir a otras maneras más saludables de enfrentar su realidad.